Nombre: "Ángel de alas oscuras"
Fandom: Harry Potter.
Autor: Lady Lucifer / Ororo
Clasificación: NC-17
Parejas: Tom Riddle / Harry Potter
Género: Drama, angst.
ADVERTENCIAS: Se mensiona tortura de personajes, abuso de poder, situaciones fuertes
Nota de la autora: Aquí les traigo el primer capitulo arreglado de una de mis obras mas largas, fue sin lugar a dudas el primer fic monstruoso que se me ocurrió escribir, y después de mucho tiempo aquí esta de manera mas ordenada e igualmente monstruoso.
Prepárense para una historia larga y repleta de misterios.
Capitulo 1: Nueva Profecía
Harry Potter se encontraba descansando, sentado en el borde de la ventana, mirando con ojos melancólicos hacia el cielo…contemplando con vacía fascinación la blanca y brillante luna…
Este verano se supone que debería haber sido el mejor de toda su corta vida por primera vez en sus casi 17 años de vida no se había quedado en la casa de los Dursleys, todo gracias a Remus Lupin, el cual había convencido a Dumbledore para que fuera así. Así que tras la insistencia del hombre lobo le habían permitido quedarse en Hogwarts.
- “Bueno por lo menos no estoy con mis tíos” – soltó el moreno en un susurro desganado, sin despegar la vista del cielo nocturno.
Pero, por mas que todo esto se viera bueno, el ojiverde no sentía que lo fuera…el recuerdo de todo lo que había sucedido con su vida le atormentaba en todo momento, la muerte de su padrino no le dejaba dormir, las otras tantas muertes que se habían provocado por su culpa…todo eso no le permitía disfrutar de aquella solitaria libertad que había ganado...
- “Lo extraño tanto…” - el recuerdo de Sirius, tan fresco en su memoria, como si hubiese sido ayer que le había ofrecido vivir con el.
Sirius no se había merecido lo que le había sucedido...Había sido su culpa, todo por protegerle a el, todo porque creyó que estaba en peligro…todo por esa estupida profecía…Ahora se sentía solo, desamparado, abandonado y triste, si bien aun conservaba a Remus, el último de los verdaderos merodeadores…se había quedado sin padres y ahora sin padrino, el dolor muchas veces era insoportable, a todos ellos los había conocido tan poco…
Todos ellos muertos por la misma persona…
Todo por la culpa del Lord Oscuro…
- //Voldemort…//
Ante el solo pensamiento de ese nombre la ira le comenzó a llenar rápidamente, envolviéndolo todo en su interior, como veneno corriendo por su sangre, entre sus venas, en lo mas profundo de su ser…
El solo hecho de recordar que “Él” era él culpable de todas sus desgracias lo llenaba de un odio irracional y sin precedentes…su respiración se acelero y cerró las manos en firmes puños.
De la ventana abierta una suave brisa helada acarició su rostro, calmándole poco a poco…Una vez mas calmado nuevamente se sintió solo y abandonado…
En el castillo solo estaban algunos integrantes de la orden y uno que otro profesor. Lo triste de ello era el hecho de que Remus no se encontraba entre estos, ya que había sido enviado por el Director a una misión a quien sabe donde y no volvería de esta hasta dentro de un mes…
Dumbledore parecía empeñado en hacerle sentir miserable, y bueno lo estaba logrando…a esta soledad se le sumaba el dolor de las torturas y asesinatos del Lord, las cuales repercutían a causa de la cicatriz en los sueños de Harry, y todo parecía aun mas insostenible de lo que realmente era…
El Lord Oscuro en este ultimo tiempo había estado torturando y matando mucho, los solos dolores de cabeza de Harry terminarían por destruirlo…
Lo único bueno que había sacado de venir a Hogwarts durante el verano, aparte del claro hecho de no compartir techo con sus horribles parientes, era que ante el claro hecho de que estaba casi completamente solo en el enorme castillo, tenia tiempo para hacer algo que le gustaba…Investigar…gracias a ello había descubierto varias cosas interesante, desde salones peculiares hasta ciertos libros de contenido interesante, entre estos últimos había encontrado algo que nadie mas sabría aparte de el, algo que nadie mas merecía saber aparte de el…
En sus de investigación, en sus intentos por matar el aburrimiento y la soledad, Harry había encontrado una antigua profecía…una en la cual el era el protagonista nuevamente…La gran diferencia con esta profecía, era el hecho de que era anterior a la que había sido destruida a finales de quinto curso…
Esta profecía parecía real, sonaba mas real, sonaba mas esperanzadora…Esta era la que decía la verdad, la que debía creerse realmente…
Y Harry era el único que conocía de su existencia…
Por ahora…
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Mientras tanto muy lejos del lugar en donde se encontraba Harry Potter
En Slytherin ´ s Manor…
El Señor de las Tinieblas, ahora completamente regenerado y diferente de aquella criatura mas semejante a una serpiente que a un ser humano provocaba un pandemónium dentro de su propio despacho privado…Papeles repartidos desordenadamente sobre el escritorio de caoba, algunas pociones habían ido a parar a las paredes, cristales repartidos por la pulcra alfombra…
Decir que el Lord estaba enfadado, era decir poco…caminaba de un lado a otro estrujando un papel entre sus delgados y blancos dedos, deseando que lo que este decía desapareciera con el solo hecho de desearlo que así fuera…
- //¡¡¡Esto no puede ser posible!!! // - era lo único que pasaba por su cabeza una y otra vez, repitiéndoselo quizás lo convirtiera en realidad. Soltó algo parecido a un gruñido mientras arrojaba el dicho papel fuera de su vista, sus pasos no se detenían…
De repente el sonido de alguien golpeando a la puerta le sacó de sus debates mentales. Pero no por ello se calmo un poco más, la distracción solo altero más el ya perturbado humor del Señor de las Tinieblas.…
La puerta se abrió y por esta se asomó un mortifago.
- “¡¿Que quieres?!” – interrogó con voz demandante, las palabras soltadas con veneno.
- “Mi señor…” – le respondió el individuo con voz temblorosa, la sola presencia del Lord intimidaba a cualquier – “descubrimos…que existe una copia del documento en donde esta escrito aquello que usted tradujo…”- soltó finalmente, temiendo por la posible reacción que sus palabras podrían provocar en el Lord.
- “¡¡¡Una copia!!!” – exclamó con enfado, ¿¡Una copia!? ¿¡Como demonios podía existir una copia!? Los ojos rojos del Lord brillaron peligrosamente, mientras que el mortifago frente a el parecía hacerme mas pequeño en su miedo…- “Busquen esa maldita copia y encuéntrenla” – dijo con voz sedosa, peligrosa, esa clase de voz que les recordaba a todos los mortifagos que a pesar de la belleza que poseía ahora seguía siendo el mismo Lord Voldemort…
- “Ya lo hicimos…” – le respondió el mortifago intentado contener el temblor de su cuerpo, El Señor de las Tinieblas sonrió de medio lado ante esas palabras
- “Oh…con que ya lo hicieron…” – un claro tono de burla en su voz… - “Al parecer no son unos inútiles después de todo…” – se había calmado bastante después de haber escuchado eso, con una maligna sonrisa en su rostro clavó sus ojos rojos en el patético individuo frente a el – “¿Y?...¿Que es lo que están esperando para traérmelo?”
- “Hay un problema, My Lord” – dijo el mortifago de repente
- “¿Un problema? ¿Qué clase de problema?” – nuevamente aquella voz siseante y peligrosa…
- “De…descubrimos que…esta en…Hogwarts…”
- “¡¡¡QUE!!!” – los ojos rojos del Lord brillaron con enfado nuevamente…- “¿¡Y no han hecho nada al respecto!?
- “Pero My Lord…” – intentó decir el patético mago, pero la ira del Señor de las Tinieblas era mayor, y ahora necesitaba liberarse de ella…
- “Incompetentes…” – dijo en un susurro para luego mirar al mortifago con maldad pura – “¡¡¡CRUCIO!!!”- la varita del Lord apuntando hacia el otro mago - // ¡¡Maldita profecía!! ¡¡Maldito Hogwarts y sus malditas barreras!! //
Apenas la maldición le tocó el mortifago comenzó a retorcerse y a convulsionar ante la tortura del Lord, solo bastaron segundos para que los gritos resonaran por todo el despacho.
Lord Voldemort estaba enojado, y era mejor que todo el castillo lo supiera a través de esos gritos.
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Harry comenzó a sentir el dolor de la tortura que Voldemort estaba llevando a cabo…La mítica cicatriz en forma de rayo comenzó a arder como si quemara, sintiendo como si la cabeza fuera a partírsele en dos…Se llevó las manos a la cabeza, en un vano intento de mitigar el dolor con ello, pero no servia de nada, el dolor no se detenía, sumado a ello podía sentir como el enfado del Lord se revolvía en su interior casi como si lo sintiera el mismo…unas lagrimas rebeldes se escaparon de sus ojos, el dolor era cada vez mas insoportable…
Justo en el momento que ya estaba decidido a comenzar a gritar para ver si eso mitigaba el dolor, se escucho claramente que alguien llamaba a la puerta de su habitación, Harry no tenía fuerzas para responder, no podía hablar a causa del dolor…un nuevo golpe… ¿Por qué no dejaba de torturar? ¿Qué le había sucedido al Lord como para estar tan enojado? Al no recibir respuesta, la persona del otro lado de la puerta decidió simplemente entrar a ver que es lo que sucedía, el moreno pudo ver como la puerta se abría…
- “Harry, ¿Estas bien?” – el joven Gryffindor reconoció esa voz de inmediato…era Draco
El rubio al momento de ver al pelinegro, entendió de inmediato que era lo que sucedía, Draco sabia que era otro de esos dolores de cabeza provocados por el Lord…por esa razón no dudo un segundo en acercarse al ojiverde y envolverlo entre sus brazos, a la espera de que eso le distrajera algo del dolor que de seguro estaba sintiendo…
- “Harry calmante, ya pasara” - susurraba el joven heredero Malfoy, buscando tranquilizarle con sus palabras. – “Ya pasara”
Con una paciencia que había aprendido a desarrollar, Draco espero hasta que Harry hubiera dejado de apretar su cabeza, sabiendo que el dolor se había disipado, por lo menos por ahora…
Cuando al fin todo termino el rubio pudo respirar tranquilo, a pesar del hecho de que sabia que esto era de cierta manera normal para el moreno, no podía acostumbrarse a ello, no podía entender como un dolor tan grande podía ser transmitido por esa pequeña y aparente inofensiva cicatriz, de hecho, si no lo hubiese visto unas cuantas veces jamás lo hubiera creído…ver sufrir al pelinegro no era algo muy gratificante que digamos, quizás unos años atrás le hubiera gustado presenciar algo como esto…pero ahora eso era diferente, ahora las cosas entre los dos eran diferentes…ahora eran amigos…
Se separaron…Harry le miró con sus ojos verdes llenos de agradecimiento, el rubio solo sonrió de medio lado ante esto…
- “Gracias Draco” – dijo el ojiverde con la voz algo trabajada.
- “De nada” – fue la simple respuesta que le dio el rubio, el cual no sentía que había hecho demasiado, muy por el contrario, sentía que no había sido de ayuda para nada, después de todo, no había logrado detener el dolor, El Lord lo había hecho…
Esta clase de situación para cualquiera que no lo supiera realmente le parecería de lo mas extraña y difícil de creer, después de todo, todos sabían de la rivalidad de Draco y Harry, aunque lo que todos no sabían era que las cosas habían cambiado…En este corto periodo de tiempo que llevaban de vacaciones las cosas entre el Slytherin y el Gryffindor habían cambiado bastante…
Ahora los eternos rivales…se habían convertido amigos…
Todo esto sucedido en unas circunstancias que habían sido de lo más interesantes…Por lo menos para ambos…
Sucedió cuando Harry llevaba una semana en el castillo. Al inicio de las vacaciones por alguna extraña razón el rubio había aparecido en el castillo con el profesor de pociones, y se había quedado después de que este se había ido a quien sabe donde, Según lo que había descubierto Harry por si mismo, el rubio había sido traído al castillo porque había recibido el llamado ante el Lord para ser marcado, un acto que para sorpresa de muchos, incluso la del mismo Harry el joven heredero Malfoy no deseaba llevar a cabo…
El ojiverde había encontrado al rubio llorando amargamente su suerte en lo alto la torre de astronomía, lugar al cual se había ido a esconder para que nadie pudiera ver su sufrimiento…Ese día, directamente del rubio Harry había descubierto que este no deseaba convertirse en mortifago, por la sencilla (o quizás no tanto) razón de que su padre había sufrido mucho siendo de las filas del lado oscuro, mas aun al ser uno de los conocidos y temidos “Ángeles de la muerte”, los mortifagos mas temibles y leales al Lord…
Su padrino, el que para sorpresa de Harry era el profesor de pociones, Severus Snape había sufrido también, pues este era el otro ángel de la muerte, junto a su padre lo habían pasado bastante mal…
Sumado a todo ello, su madre había sido asesinada el año pasado por un mortífago, en unas peculiares circunstancias, según lo que el mismo Draco le había dicho…estas eran algunas de las razones por las cuales Draco no deseaba ser marcado… el no deseaba sufrir como todos ellos…
El moreno de ojos verdes había encontrado razón en esas palabras, el rubio no mentía al decir que no quería ser mortifago, tampoco mentía al decir que a pesar de ello no podía negar su admiración por las artes oscuras, estaba en su naturaleza…
Harry se había sorprendido al descubrir que mas ambos estaban de acuerdo en varias cosas…ya no valía la pena ser de ninguno de los dos bandos, ninguno era mejor que el otro…Tras mucho pensarlo se habían dado cuenta de ello…
Así fue como empezando con pequeñas palabras, acuerdos y treguas terminaron por volverse amigos…pues ambos seriamente a estas alturas ya pensaban que toda esta guerra era algo sin sentido alguno que debía acabar de una vez por todas…
- “Aun no puedo acostumbrarme a ver que te suceda esto…” – dijo Draco de repente mientras ayudaba a Harry a ponerse de pie, había caído de rodillas en el suelo de la habitación a causa del dolor – “el Lord realmente terminara matándote sin siquiera apuntarte con su varita…” – comentó como quien no quiere la cosa guiando a Harry hasta la cama, lugar en el que le indico que se sentara.
- “Pues eso es lo que parece...” – le respondió el moreno con voz cansada y una medio sonrisa
- “No me parece divertido Harry” – le medio regaño el rubio.
- “No estoy diciendo que lo sea”
- “¡Entonces deja de sonreír así!” – esa actitud de `ya no vale la pena´ le hartaba algunas veces, el moreno aun tenia bastante por lo que luchar
- “Cambiando el tema” – dijo Harry llamando la atención del otro – “¿Para que venias?” – preguntó mirando al rubio, el cual se sentó junto al moreno en la cama.
- “¡¡Cierto!! Casi lo olvidaba” – comentó mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro pálido – “Con todo esto, se me había olvidado” – dijo refiriéndose al dolor de la cicatriz – “Venia a decirte como buen amigo que soy” – dijo con ciertos aires de aquella arrogancia que siempre le había caracterizado – “De que lo mejor que puedes hacer es salir de esta habitación, sale a los jardines del castillo, toma aire…”
- “No deseo salir” – Le respondió el moreno obstinadamente.
- “¡¡¡eres bruto!!! – Le regaño medio desesperado – “Si sigues quedándote aquí terminaras por enfermarte, el encierro hace mal y mas aun a una persona como tu”
- “A que te refieres” – inquirió Harry haciéndose el desentendido.
- “No me vengas con esa cara…” – le dijo el rubio estrechando sus ojos plateados – “Te dejas llevar por la emociones, y llevas un buen tiempo deprimido” – continuo diciendo Draco, mientras que Harry evitaba mirarle - “Podrías intentar hacerte algo”
- “No voy a suicidarme si eso es a lo que te refieres Draco”
- “Quizás tengas razón, pero eso no me evita pensar que puedas hacerte daño”
- “Draco, por favor cambia de tema” – medio suplicó el moreno clavando su mirada en sus manos, el rubio soltó un suspiro ante esto. Quizás ahora podrían conversar sobre algo que le tenía intrigado desde el momento que llego al castillo al inicio de las vacaciones.
- “Harry”
- “¿Si?”
- “Hay algo que no le estas diciendo a los de la orden…” – soltó Draco abruptamente, Harry levanto la mirada y la clavo en la del rubio
- “¿A Que te refieres?” – inquirió el moreno enarcando una ceja.
- “Aunque quieras ocultarlo…tu poder se hace cada vez más grande” – dijo el rubio, Harry abrió sus ojos verdes en sorpresa ante esas palabras – “Si tu te vuelves poderoso, eso solo significa que el Señor de las Tinieblas también se hace más fuerte…”
- “¿Y tu como sabes eso?” – interrogó el moreno sin despegar la vista del rubio, el cual sonrió de medio lado.
- “Puedo sentirlo…” – dijo como si fuera la cosa mas simple del mundo, Harry le miro incrédulo.
- “¿Como es eso?”
- “Mis poderes han aumentado también” – le informó dándole una de esas sonrisas arrogantes marca registrada – “Pero por supuesto no tanto como los tuyos…pero el hecho esta en que han aumentado…y al hacerlo puedo sentir las grandes presencias mágicas…”
- “Eso es extraño…” – comentó Harry una vez que Draco hubiera dicho eso.
- “No me vengas con eso, tu no eres el mago mas normal del mundo tampoco” – le regañó el rubio – “Ya, además no hemos desviado del tema central de todo esto” - Sentencio Draco con voz seria, a lo cual el moreno simplemente desvío la mirada.
- “¿¿Y cual era el tema central??” – soltó el moreno poniéndose de pie y haciéndose el desentendido.
- “¡¡Harry!!” – exclamó Draco – “Tienes que salir de esta habitación, llevas demasiado tiempo encerrado, puede hacerte mal”
- “Esta bien, esta bien ya entendí…”
Draco se puso de pie también y se acercó a la puerta de la habitación dispuesto a irse…Se volteo y miró a Harry, el cual había vuelto a sentarse en el borde de la ventana, el rubio no pudo mas que soltar un suspiro cansado…
- “Yo sigo diciendo que salgas de aquí, el encierro te enfermara…” – dijo finalmente el Slytherin, Harry le miró con sus ojos verdes cargado de esa tristeza.
- “No te preocupes estaré bien…gracias por preocuparte Draco…” - Sonrió Harry a su amigo, el cual le devolvió la sonrisa después de dudarlo un poco.
- “No lo agradezcas para eso soy tu amigo” - el joven rubio se retiro de la habitación dejando a Harry nuevamente solo con sus pensamientos y recuerdos…
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El Lord Oscuro ya se encontraba mucho más calmado, o quizás solo quería aparentar que estaba calmado, porque por dentro estaba gritando toda su furia…
Voldemort caminaba de un lado para otro en aquella habitación decorada al mas puro estilo Slytherin, verde y plateado los colores dominantes, muebles hermosamente tallados, techo alto y amplias ventanas…Era su dormitorio…
Abruptamente detuvo su pasear, clavó sus ojos rojos en un enorme y precioso espejo de cuerpo completo, con pasos firmes se acerco a este hasta que estuvo de pie frente a el…
Al mirarse en el espejo, la imagen que le de volvió era bastante diferente a la de algunas semanas atrás…
Todos los rasgos serpentinos, el cuerpo débil y esquelético, habían sido dejados a tras y reemplazados por un cuerpo atractivo, joven y fuerte…
Su apariencia era la misma de cuando tenía 25 años, su piel era pálida pero no blanca como lo había sido antes, sus rasgos estaban finamente delineados, su cuerpo estaba bien marcado, pero nunca cayendo en lo exuberante, con el cabello de un precioso color negro azabache…
Pero lo que más llamaba la atención de su actual apariencia eran sus ojos, los cuales tenían un color rojo sangre, un rasgo que a pesar del conjuro y las pociones que habían cambiado su apariencia no habían logrado quitar…
Lo cual a pesar de todo era mejor, sus ojos intimidaban, provocaban temor, recordaban a aquellos que los miraban quien era realmente, detrás de ese color sangre se podía ver la maldad, la sabiduría, los años de arduo trabajo…
El Lord se alejó del espejo y se encaminó hacia su cama, la cual tenia unos preciosos doseles caoba y sabanas de un color verde petróleo, queriendo borrar todo lo que había sucedido en el día, se sentó en el borde de la cama, su rostro mostraba el enfado que aun sentía…
- “Debo conseguir esa maldita profecía…” – se dijo en un susurro.
No podía dejar de pensar en la maldita profecía, y en el hecho de que existía una copia en alguna parte del castillo de Hogwarts, lugar en el cual podía ser encontrada por algún incompetente de la orden…Apretó sus puños ante esa posibilidad…
Tras dejarse llevar por aquellos sentimientos El Señor de las Tinieblas decidió que lo mejor era descansar y dormir un poco, el reloj de la pared ya marcaba las dos de la madrugada, ya tendría tiempo para pensar temprano en la mañana…
Tras arreglarse y prepararse para dormir, se adentro en las sabanas de su amplia cama, al momento de cerrar sus ojos, no pudo evitar abrir la conexión mental que tenia con el joven Potter, por lo cual se adentro en la mente del joven mago con bastante facilidad…
Para sorpresa del Lord dentro de la mente de Potter no encontró nada, como si solo hubiera oscuridad, ni pensamientos, ni recuerdos, nada…
Al mismo tiempo que el, Harry se encontraba también encerrado en una oscuridad que no le pertenecía…
Ambos encerrados en la oscura mente del otro, sin poder o sentir nada, pudieron escuchar exactamente las mismas palabras, resonando al mismo tiempo en ambas mentes…
La leyenda de la guerra terminara
Cuando la luz y la oscuridad se vuelvan una
Aunque eso sea en contra de todo lo que se creía
La luz sufrirá por su decisión…
Y por ello su vida correrá peligro…
Un dragón será su guardián…
La oscuridad sufrirá por su corazón…
Y por ello muchas cosas cambiaran…
Una serpiente será su guardián…
Todo lo que se pensaba cambiara…
El Lord de la oscuridad cambiara
Y la luz de su opuesto también lo hará
Marcados como opuestos y como iguales,
Cuando realmente son complementos el uno del otro
Aceptar esta realidad les dolerá
Mas de lo que todos creen…
Fin capitulo 01.
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